Sichuán

Estaba por quedarme dormido cuando Gemma me preguntó si yo también tenía el estómago revuelto. Habíamos cenado una pasta con chícharos, queso parmesano y tres tipos de pimienta molida: negra, blanca y sichuán.

La primera vez que probé la pimienta sichuán fue en un restaurante en la ciudad. No recuerdo el nombre pero me vienen a la mente estas palabras:

town
luxe
fix
devil
red
fire
fish
blood
mafia
dark
mesas
redondas

No me había dado cuenta pero parece ahora pienso más inglés que en español. Me molesta un poco eso aunque no sé bien por qué.

El mesero nos advirtió que era un platillo especial y alguien en la mesa se rió. Supuse que ya lo había probado antes. Un pescado blanco con pimienta sichuán. Al morder las pimientas se siente un cosquilleo en la lengua, más que como si se quemara, es como si se durmiera.

numbs
your
tongue

Hay otro restaurante, el Hong Kong Cafe, en donde sirven un platillo de cerdo molido con hongos, tofu y pimienta sichuán. Junto a ese lugar hay un mercado de comida asiática. Ahí fue donde compramos un paquete de pimienta sichuán que usamos anoche para la pasta con chícharos y queso parmesano.

Le dije a Gemma que no, que no tenía el estómago revuelto y me di la vuelta para acomodarme mejor. Casi siempre duermo de lado, hacia la ventana. Me concentré en sentir el estómago: cuando me di cuenta de que comenzaban movimientos extraños en mis intestinos, me quedé dormido y ya no pude decirle a Gemma nada.

Eran las tres de la mañana cuando desperté sudando.

Solo dos horas después pude volver a quedarme dormido. Soñé que alguien me compartía una barbacoa echada a perder.